Reseña Histórica

Gualaceo cantón altivo y señorial, debe su riqueza a la diversidad cultural y de razas entremezcladas con el paso del tiempo, así podríamos hablar de un origen mítico con la leyenda de las Guacamayas, que dieron paso a la tribu Cañari, los primeros ayllus, los conquistadores incas y luego los colonos españoles.

De la primera historia conserva su nombre, pues se dice que Gualaceo proviene del vocablo cañarí GUALASSEO, que a su vez se deriva de GUAL, que significa Guacamaya. Reza el cuento que después de salvarse de un gran diluvio, los hermanos Antaorrupangui y Cusicayo fueron recibidos en su hogar por dos aves de esta especie, convertidas en mujeres por la gracia del Dios Viracoha. El primero de los hombres murió y el segundo se casó con la una damicela, y tomó de concubina a la otra; procediendo de ellos la descendencia y después de muertos, de sus cuerpos y almas los ríos y valles que hasta hoy embellecen a este pueblo azuayo. Otros historiadores relacionen el término Gualaceo, con “Lugar donde duerme el río”

De su comienzo como asentamiento colonizado no se tiene fecha exacta, pero es sabido que fue antes de la capital provincial Cuenca, de la que luego pasó a ser parroquia, luego villa, para posteriormente erigirse como cantón el 25 de junio de 1824.

La confección de calzado y otros trabajos en cuero, así como la fabricación de paños son las artesanías típicas del lugar. Entre las delicias que son típicas de Gualaceo está el tradicional rosero, entre otras. El movimiento comercial tiene efecto los días domingos, martes y viernes. El mejor momento para visitar Gualaceo es durante sus fiestas de aniversario de cantonización en el mes de junio, el festival de carnaval del río, la celebración de Santiago Apóstol en el mes de julio, o durante el Festival del Durazno en el mes de marzo. En la ciudad existen varios parques, siendo un atractivo de la ciudad, además con el crecimiento de la ciudad han abierto las puertas nuevos tipos de negocios incluyendo un nuevo centro comercial llamado «Las Orquídeas».